¡UN MOMENTO, QUE EXPERIMENTO!




En la ludoteca prescolar también dedicamos un tiempo para hacer experimentos. En esta ocasión hemos hecho botar un huevo de gallina, los peques pensaban que era magia; para conseguirlo pusimos los huevos en un recipiente y los cubrimos de vinagre, al día siguiente cuando llegamos al aula los sacamos del vinagre y habían perdido la cáscara quedándose en la membrana interior.
Los cogieron y estaban blandos como una pelota de espuma.

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